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Los Mochis, Sinaloa. 4 de febrero de 2025 (Prensa Club Cañeros).- Este 4 de febrero murió a los 96 años el legendario jardinero Felipe Montemayor, jugador histórico del beisbol mexicano.

“El Clipper”, nació el 7 de febrero de 1928 en Monterrey, Nuevo León. Debutó en el beisbol mexicano en 1948 y consiguió el nombramiento de novato del año además de alzar el trofeo de campeón con Monterrey.

Fue el mánager Lázaro Salazar quien ese mismo año lo trajo al beisbol del pacífico para debutar con los Cañeros de Los Mochis, quienes habían sido fundados un invierno antes. 

Con los verdes jugó de 1948 a 1952, este último año fue difícil para Los Mochis y Guaymas al tener que abandonar la contienda y Montemayor pasó entonces a Mazatlán.

En el 53 llegó a las Grandes Ligas llamado por los Piratas de Pittsburgh donde fue compañero del gran Roberto Clemente.  Quienes lo vieron jugar lo recuerdan por su swing “elegante” y le comparaban con la estrella de los Yankees Joe DiMaggio “El Yanke Clipper”, de ahí su apodo.

También jugó en Cuba y en Nicaragua donde incluso impuso un récord al conectar 21 cuadrangulares.

Hablando del invierno Cañeros fue el equipo que lo vio debutar y retirarse, pues fue con los verdes que jugó sus dos últimas temporadas en el pacífico: 1964-65 y 1965-66.

A lo largo de su carrera cosechó múltiples logros individuales y colectivos por lo que en 1983 fue exaltado al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano.

ENAMORADO DE LOS MOCHIS

La ciudad esmeralda siempre estuvo en el corazón del “Clipper”, según sus propias palabras su época con Cañeros de Los Mochis fue lo mejor que le pasó en la vida pues en esta ciudad conoció al amor de su vida, su bella y querida esposa con la que tuvo cinco adorables hijos.

El toletero contó la anécdota cuando fue invitado por la organización para los festejos del 70 Aniversario.

“Llegué muy joven recomendado por Lázaro Salazar y me pregunté como iba a aguantar cuatro meses fuera de mi casa y el tiempo se encargó de darme la respuesta, me quedé por mucho tiempo, prácticamente esta es mi segunda casa”.

Descanse en Paz Felipe Montemayor. ¡Siempre Cañero, verde por siempre!.